Las actividades altruistas, mejoran la comunicación, las relaciones interpersonales, generan confianza, optimismo y mayores cotas de felicidad en el ámbito laboral. Facilita la unión, el vínculo de las personas y el espíritu de pertenencia a la organización donde trabajan.
A través de actividades benéficas o desinteresadas como eje central, reducimos el estrés, mejoramos el estado de ánimo de las personas participantes y las dinámicas generales de equipos de trabajo. Creamos personas más motivadas, unidas y con habilidades nuevas de comunicación, planificación, resolución de problemas y de pensamiento creativo.