Los PROFESIONALES de las relaciones de AYUDA.
Publicado por xabi rodriguez en / 0 Comentarios
El trabajo que desempeña la persona profesional de las relaciones de ayuda (educadores/as, psicólogos/as, profesores/as, doctores/as, etc.) es muy laboriosa, una continua trasmisión de nuevas herramientas y conocimientos implican una constante coherencia en sus comportamientos y una actitud que sea observable por todas las personas con las que interacciona en dicha relación de ayuda.
Esta continua interacción, tiene que ofrecer un espacio de seguridad donde se sienta recogida y atendida.
Esta figura profesional debe mostrar unos valores claros y una vocación para el desempeño de su trabajo donde exista un apoyo incondicional y comprometido con su labor.
Un análisis de responsabilidades, limitaciones y recursos personales que vayan permitiendo profundizar en su relación y donde una reflexión conjunta pueda favorecer el cambio actitudinal a largo plazo. Con ello favorecer una comunicación bidireccional que deberá analizar e identificar diferentes situaciones que no han sido resueltas de forma adecuada
Este proceso de aprendizaje busca un cambio en las personas, que adquieran aquellas habilidades y capacidades necesarias para solucionar los problemas habituales en los que se ven inmersos, de manera más eficaz.
Aspectos importantes como la capacidad de conocer y manejar sus sentimientos pueden tener un mayor impacto en la persona que se intenta ayudar. Una conciencia de sentimientos, fortalezas, motivaciones y las experiencias emocionales del profesional ante diferentes situaciones de la vida cotidiana pueden ser elementos claves que guíen y encaucen el proceso de la interacción.
Como establecen Extremera y Fernández Berrocal (2002) en la escuela del siglo XXI se hace referencia a la importancia de que el profesional posea una adecuada inteligencia emocional y sean un modelo referencial en la relación de ayuda que establezcan.
Las personas profesionales en las relaciones de ayuda deben poseer la capacidad para conectar y manejar las emociones de los demás que implicará beneficios significativos en el avance del vínculo relacional entre profesional y persona atendida.